Se acerca Agosto. Deprisa y sin frenos. Y es que Julio ni lo he olido. Muchos aprovecháis para ir de vacaciones. También los hay quienes os encontráis trabajando, y sobre todo, quienes están planificando un septiembre épico. Elaborando un plan para constituir una Sociedad de Responsabilidad Limitada. Hoy, mis palabras van para vosotros, emprendedores.
Creo que la mejor manera de acercaros a este concepto es aportar la definición de sociedad limitada, así como estudiar los puntos clave. Que no son otros que las ventajas e inconvenientes que este tipo de sociedades nos plantean.
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Qué es una Sociedad Limitada: Definición
Es una sociedad capitalista en la que los socios son participantes sociales de la misma en partes iguales, acumulables e indivisibles en función de sus aportaciones dinerarias y responden a su vez de su trozo del pastel.
Bajo el nombre comercial –seguido de S.L.- puede ser constituida por una sola persona o por varias, sin establecerse legalmente un límite máximo. Estas personas serán los socios –participantes-. Si una empresa constituida como Sociedad Limitada fuera una marioneta, los socios serían los titiriteros a través de la Junta General de Socios y los Administradores –Solidarios, mancomunados o a través de un Consejo de Administración-, los hilos que ejecutan la voluntad del titiritero. No obstante, indicarte: ser adminsitrador de una empresa no es moco de pavo, y estos tienen mayor responsabilidades que los propios socios.
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Ventajas de la Sociedad de Responsabilidad Limitada
Desconozco tus circustancias, apreciado lector. Pero si has llegado aquí a través de Google, será porque estás buscando una respuesta. Y creo que la tengo para ti. ‘Sí, una sociedad de responsabilidad limitada es una buena solución para iniciar una actividad económica’.
Ahorro fiscal
Pueda caberte la duda de si es mejor ser autónomo o constituir una sociedad de responsabilidad limitada. Si bien no hay una respuesta universal, te diré que (1) cuando apuntales tu posición en el mercado, (2) con unos ingresos fluídos de alrededor de 50.000€ anuales y (3) consguir ahorrar 3000 €.
Si no cumples estos requisitos, también puedes constituir una Sociedad Limitada, aunque te aconsejo que estudiéis la opción de ser autónomo –y si sois mas de uno, autónomos estableciendo una colaboración-.
El IRPF de los autónomos es un impuesto progresivo. A más pasta ganas, más cedes al Estado. Y sin embargo, este impuesto será sustituído por el Impuesto de Sociedades si constituyes una Sociedad Mercantil. El 25% como normal general; 15% si eres emprendedor y 20% para determinadas cooperativas –incluso a veces, del 10%-.
Responsabilidad Limitada
Otro de los puntos fuertes de optar por una Sociedad de Responsabilidad Limitada es precisamente ese. Que la responsabilidad está limitada a tus aportaciones. Digamos que si pones sobre la mesa 3.012 €, será tu apuesta mínima y si pierdes, solo perderás esos 3.012 € -o lo que vayas incorporante como Capital Social y otros bienes a nombre de la empresa-. Esto es, las deudas de la empresa se sufragan con el patrimonio de la empresa.
Sin embargo, siendo autónomo el riesgo es mayor ya que respondes con todos tus bienes y derechos, presentes y futuros. Los tuyos, y los de tu cónyuge en el caso de que estéis casados en régimen de gananciales.
Inconvenientes de la Sociedad de Responsabilidad Limitada
Hasta aquí muy bonito. Monto mi chiringuito, si la cosa va mal desmantelo el chiringuito e incluso puedo haber salido ganando. Pero es que las sociedades de capital entrañan un riesgo también, y este riesgo no me gusta nada cuando se trata de Sociedades de Responsabilidad Limitada.
Acceso al crédito
Si bien lo considero como una desventaja, no es ni mucho menos una desventaja absoluta. Las Sociedades Limitadas tienen una mayor limitación para acceder a determinados créditos, precisamente porque las entidades financieras y de crédito se arriesgan al concederlos al tener la responsabilidad limitada.
Pero claro, hay empresas y empresas. Si tienes una Sociedad Limitada con un alto nivel de solvencia, las condiciones crediticias serán favorables. De lo contrario, y de ser una de nueva creación la cosa se complica. Te recomiento la lectura de Sociedad Limitada Nueva Empresa que escribí hace unos días, ya que en esta entrada hablo sobre este tipo de Sociedades Limitadas que vence uno de los mayores inconvenientes de las SL: el acceso al crédito. Ideal para jovenes emprendedores. Además, aprenderás los pasos para constituir cualquier tipo de sociedad capitalista.
Transmisión de participaciones sociales
Una vez hemos superado nuestro problema de financiación, nos encontramos con otro aún mas grave. Es la rigidez del sistema societario de una SL. Estas empresas tienen un espíritu legal que las ha concebido como empresas familiares –de sangre, o de lazos de amistad-. Y para mantenerlo, es la propia legislación mercantil la que impone límites y trabas a la hora de transmitir estas participaciones.
Las transmisiones –especialmente inter vivos- de participaciones no pueden ser libres y transmitibles a terceros ajenos a la sociedad. Entran en juego factores como el derecho de separación del socio, de preferencia, la autorización de la Junta para transmitir a terceros, etc. Tampoco se puede obligar a un socio a vender más participaciones de las que él quiera.
Mayor control societario
Esto ya no es como antes, amigo. Tu pequeño negocio, un libro de contabilidad y pa’ lante. Ahora las exigencias requeridas para un buen administrador de la sociedad son mayores. La contabilidad debe de ser rigurosa y exhaustiva, deberás presentar tus cuentas anuales, inventarios, bienes de inversión, los libros de registros de socios, actas de juntas, libro de participaciones sociales, etc. Por no hablar del aspecto tributario y la presentación de facturas, operaciones societarias y demás. La no llevanza de estas obligaciones puede conllevar responsabilidades para el administrador de la sociedad, quien no responderá ya de su parte del pastel si lo tuviere, sino que también responderá personalmente.
Por ello, mi recomendación es que contactes con una gestoría que pueda ayudarte a llevar toda la marabunta de papeles que empezarás a acumular. Yo personalmente no me dedico a eso -más bien te asesoro para solucionar problemas sociales-, pero sí que puedo presentarte a un par de amigos que lo hacen de lujo.
En definitiva. Constituir una Sociedad de Responsabilidad Limitada tiene más ventajas que inconvenientes. Pero puede convertirse en una trampa mortal si no está bien constituida desde sus inicios. Por ello, me pongo a tu entera disposición para montar el mejor chiringuito que haya visto España.
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